Fiesta, una marca que llevamos en el corazón
Nos ha dejado entre sorprendidos y apenados la noticia del cierre de Fiesta, el mítico fabricante de caramelos. La empresa, afincada en Alcalá de Henares, ha comunicado esta semana que le es imposible afrontar las condiciones del concurso de acreedores en el que estaba metido y ha solicitado la liquidación definitiva.
Esto dicho así suena a que cierran y punto, pero realmente lo que parece que es la intención de sus responsables es que la firma salga a subasta y que algún grupo inversor se haga con ella para salvar la marca y a sus trabajadores.
Lo cierto es que nada más saltar la noticia en los medios, se han sucedido los mensajes de sorpresa, tristeza, incluso terror por imaginarse un mundo sin las golosinas que fabrica Fiesta. ¿Desaparecerán los Kojak? ¿No volveremos a catar las moras de gominota? ¿Y qué hay de las deliciosas piruletas de corazón?
Esta marca se había hecho un hueco en nuestro dulce corazoncito, para muchos significaba agarrarse a un resquicio de nuestra infancia, ese pecado confesable que nos concedíamos de vez en cuando (o cada día, jeje). Esto sí que es engagement, y lo demás tonterías 😛 . Hoy día las cosas no son fáciles para casi ninguna empresa, pero sí creemos que esta en particular cuenta con una ventaja frente a otras del sector y es que su marca vale mucho. Hay un potencial sólido que puede salvarle en esta guerra una vez que sus problemas de gestión se regularicen. ¿Rebranding a la vista?
Deseamos lo mejor para el futuro de la empresa, los trabajadores y la marca. ¡Que no pare la Fiesta!